Ticker

6/recent/ticker-posts

Ad Code

Responsive Advertisement

"De la sumisión a la rebelión de los gobernadores"

030825_milei_gobernadores_pacto_mayo_afp_g

De la sumisión al grito de los gobernadores

De la sumisión al grito de los gobernadores

El pasado domingo 03 de agosto de 2025, cinco gobernadores de diferentes provincias de Argentina decidieron sacudir el monótono panorama político del país, formingando un frente electoral multicolor para las inminentes legislativas de octubre. Los mandatarios provinciales, Martín Llaryora (Córdoba), Maxi Pullaro (Santa Fe), Ignacio Torres (Chubut), Claudio Vidal (Santa Cruz) y Carlos Sadir (Jujuy), parecen haber tenido suficiente con la falta de atención del gobierno central a sus demandas y han decidido dar un paso al frente.

Una iniciativa audaz

Esta sorpresiva iniciativa busca posicionarse como una posible tercera vía en el panorama político actual, que se encuentra polarizado entre los extremos representados por el gobierno de Javier Milei y el kirchnerismo. A través de este movimiento, los gobernadores procuran establecer un equilibrio fiscal y promover políticas productivas, presentando una alternativa moderada y razonada.

Si bien es cierto que la idea de una tercera vía siempre ha sido tentadora en el imaginario político argentino, es necesario ser cautos y no caer en entusiasmo exagerados. El desafío que tienen ante sí estos gobernadores es mayúsculo, ya que deberán demostrar que su proyecto es genuino y sostenible, y no caer en las prácticas tradicionales que tanto critican.

El contexto detrás del grito

El contexto actual es tenso. A una semana de la inscripción de las coaliciones que conformarán el nuevo Congreso, los gobernadores se habían unido hace un mes para exigir que el gobierno central dejara de retener fondos que les corresponden a las provincias. Su reclamo por los ATN (Aportes del Tesoro Nacional) y la distribución del impuesto a los combustibles cayó en oídos sordos, como suele suceder en esta gestión.

Ante esta situación, los gobernadores decidieron llevar sus reclamos al Congreso, con la intención de convertir sus demandas en proyectos de ley. Una jugada audaz que parece haber sido el detonante para este nuevo paso al frente. Los mandatarios provinciales saben que su movimiento puede tener un impacto importante en las elecciones de octubre y, quizás, más allá.

Interrogantes y desafíos

Surge entonces una serie de preguntas que se imponen ante este nuevo escenario. ¿Cómo se posicionarán estos gobernadores en el espectro político? ¿Serán dialoguistas, opositores o una mezcla de ambos? ¿Lograrán conformar un bloque legislativo sólido y homogéneo? ¿Podrán mantener una línea coherente y sostenida en el tiempo?

Las posturas oscilantes que han tenido algunos de ellos respecto al gobierno central generan cierto escepticismo. Además, las particulares dinámicas políticas de cada distrito complican el panorama. Por caso, la situación en Córdoba, donde el gobernador Llaryora se alia con figuras de la UCR y el PRO, podría generar fricciones internas importantes en esos partidos.

Otro desafío importante será mantener la unidad y coherencia del grupo frente a las tentaciones y presiones locales. Las elecciones presidenciales de 2027 se vislumbran en el horizonte y algunos podrían verse tentados a priorizar sus proyectos personales.

El gobierno y la oposición, al margen

El gobierno central ha optado por ignorar o despreciar esta iniciativa. Algunos funcionarios han llegado a ironizar sobre el anuncio realizado en Buenos Aires por estos gobernadores "federales". Por su parte, Axel Kicillof, enfrascado en la compleja campaña bonaerense, guarda silencio.

Tampoco hay referencias al tema por parte de Juan Grabois, quien parece más preocupado en las listas nacionales. Quizás intuya una competencia a su plan presidencial o, quién sabe, tal vez apueste a sumarlos a una gran coalición anti-Milei.

Conclusión

Los cinco gobernadores que han dado este grito federal tienen en sus manos la oportunidad de construir algo nuevo y diferente. Sin embargo, el camino será arduo y estarán bajo la lupa de todo el espectro político. Si bien el movimiento parece estratégico y no táctico, solo el tiempo dirá si esta apuesta será exitosa o terminará diluyéndose en el intento.

En un panorama político tan convulso y polarizado, cualquier intento de diálogo y equilibrio es bienvenido. Ojalá que este grupo de mandatarios provinciales logre su objetivo y no caiga en las tentaciones y vicios del pasado. El país necesita de líderes que pongan el interés general por encima de las ambiciones personales.